Desde “el rechelao” (la explanada que hay frente al pórtico de la iglesia) se contemplan unas maravillosas vistas del valle del Onsella y de la sierra de Leire, que en días claros puede distinguirse hasta su majestuoso monasterio. Prueba del humor aragonés que demuestran las gentes de Sos es que cuando ven a un turista o un foráneo en el Rechelao, se acercan a él y le preguntan:
-¿Sabes qué es lo primero que hacen los monjes del monasterio de Leire cuando se levantan por las mañanas y abren las ventanas de sus habitaciones?
-No- responde el foráneo-
-Versos- contesta el sosiense- lo primero que
hacen es VER SOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario