Ermita de San Nicolás de Ceñito (Sos del Rey Católico) |
Estos dos últimos tipos de
marcas (de trazado y de mesura) formaban parte directa en las diferentes fases
constructivas de una edificación, reproduciendo en la obra las medidas y la
modulación, es decir, la repetición de las dimensiones de una unidad de medida
y figuras geométricas tomadas como patrón que determinaban la disposición y el
tamaño de los diferentes elementos arquitectónicos de la obra.
Las marcas de mesura obedecen a la más pura y lógica ciencia de la
geometría. Por norma general los obreros en la Edad Media, o peones de obra, no
sabían leer, por lo que las figuras geométricas sencillas (cuadrados, círculos,
triángulos,…) les permitían reproducir fácilmente, en todas las dimensiones y
con precisión, las disposiciones previas y adaptarse al terreno, asegurando la
concordancia entre la concepción de la obra y su ejecución. El profesor José
Antonio Ruiz de la Rosa señala que “la
precisión conceptual y comunicativa de la geometría, su capacidad de definición
de las formas planas y tridimensionales, de sus relaciones y combinaciones, ha
estado presente desde los comienzos de la arquitectura como arte: la geometría
es la base de toda articulación arquitectónica”[1]
Sabemos que las unidades de medida
en la época que nos ocupa eran distintas en cada lugar; incluso en una misma
comarca variaban de una localidad a otra, por lo que no existían unos patrones
genéricos de medida en la Península Ibérica, y es por esto que los maestros de
la Edad Media, para las obras de gran envergadura, utilizaron la geometría
simple para trasladar, con total precisión y sencillez, lo dibujado a pequeña
escala al tamaño real de la construcción. Así, por ejemplo, con el círculo y
los arcos del mismo proyectaban las líneas básicas de las bóvedas y las
distintas formas de los elementos que la conforman, como las dovelas y las
claves.
En resumen, estas marcas se confeccionaban sin necesidad de grandes
conocimientos teóricos, pero teniendo en cuenta los principios básicos de la
geometría de Euclides, pero sobre todo se basaban en procedimientos empíricos,
altamente depurados y de una absoluta sencillez en su aplicación. Esta
sencillez en la aplicación de la geometría facilitaba la asimilación y puesta
en práctica a sus artífices que, en muchos casos, no tenían una preparación
teórica suficiente.
En el presente post vamos a centrarnos en las marcas de mesura, poniendo
como ejemplo, y exceptuando las varas aragonesas o varas jaquesas, unas de las
escasas marcas de mesura existentes en Aragón, hasta ahora conocidas, y que se
encuentran en el exterior del ábside de la ermita de San Nicolás de Ceñito, en
el término de Sos del Rey Católico. Otras de estas marcas, muy similares a las de Ceñito, con los mismos dibujos y
diseños, aunque existe alguna variación, las encontramos en el antepecho del
acceso a la Sala Capitular del Monasterio de Santa María de Veruela (Zaragoza),
de las cuales el Doctor Arquitecto Kim
Lloveras i Monserrat ha realizado un
profundo estudio publicado en 1990 por el Servicio de Cultura de la Diputación
de Zaragoza.
Pero si estas marcas de mesura eran tan indispensables para el maestro de
obra, ¿porqué no existen más marcas o dibujos
semejantes en otros templos o construcciones medievales? Parece ser que
la respuesta la tenemos en que normalmente este tipo de tablas de cálculo se
solían realizar sobre otro tipo de material, con una superficie mucho más
dúctil para realizar inscripciones, como
mortero de cal, barro o madera, pero a la vez mucho más perecederos, por
eso la excepcionalidad de estas dos ubicaciones aragonesas de Ceñito y Veruela
inscritas sobre piedra.
Ambas ubicaciones nos están mostrando el lugar donde los maestros de
obra y operarios acudirían para tomar
las medidas oportunas para levantar las respectivas edificaciones; el lugar
donde, a partir de las innumerables combinaciones geométricas de las medidas de
los dibujos allí representados, se pueden obtener todas las dimensiones de la
ermita de San Nicolás de Ceñito y del
monasterio de Veruela. Son las tablas de cálculo y referencia del maestro de
obra, aunque hay quienes interpretan que las de Ceñito son simplemente
simbólicas; pero si así fuera, ¿Para qué dibujarlas?¿Qué sentido tiene realizar
unas inscripciones de medida en la piedra y no usarlas? Además, las “marcas de
medida” de San Nicolás de Ceñito están acompañadas, al parecer, de una “marca de trazado” que nos indica la planta y
proyección de la ermita, razón de más para dibujar junto a ella las oportunas “marcas
de mesura”.
Piedra de mesura. Sala capitular del Monasterio de Veruela |
En el Monasterio de Veruela estas
marcas están compuestas por tres pies: pequeño, medio y grande, que miden 19, 23 y 25
cm de longitud respectivamente; escuadras de diferentes longitudes y cuatro
dobles círculos entrelazados formando una “ vescica” cuyos diámetros de circunferencia interior y
exterior miden 14 y 17 cm respectivamente.
Piedra de mesura. Monasterio de Veruela. |
Bajo la ventana del ábside se encuentran la piedras de mesura. Ermita de San Nicolás. Ceñito (Sos del Rey Católico) |
En la ermita de San Nicolás de
Ceñito encontramos en una piedra bajo la ventana axial de su ábside por su
parte exterior un pie pequeño de 19 cm idéntico al de Veruela. La piedra
inferior lamentablemente ha sufrido el desgaste del paso del tiempo y se
encuentra desconchada casi en su totalidad, pero todavía puede apreciarse, en
el pequeño trozo original que ha quedado en su parte superior derecha, la punta de otro pie de diferente tamaño, al parecer mayor que el anterior, siendo muy probable que en la parte de la piedra que irremediablemente se ha perdido
se encontrara la tercera medida de pie.
En el sillar situado a la izquierda del
que reproduce el pie completo de 19 cm se observan una serie de círculos
trazados con compás y divididos interiormente por 6 semicircunferencias
cruzadas formando una roseta de seis pétalos elípticos. Son cuatro
circunferencias entrelazadas entre ellas por su centro, a modo de una "vescica", patrón de medida para los constructores. Asímismo
existe otra marca junto a los círculos, casi imperceptible debido a su
borrosidad, que bien pudiera tratarse de una escuadra.Y junto a ellas una
inscripción que probablemente sea una "marca de trazado" indicándonos la planta y
proyección de la ermita. Se trata de una línea longitudinal cruzada
perpendicularmente en sentido horizontal por tres segmentos a diferentes distancias, donde entre los
dos segmentos inferiores hay un semicírculo que indicaría la ubicación de la
portada del templo.
Detalle de las cuatro circunferencias entrelazadas |
Marca de trazado y marcas de mesura en San Nicolás de Ceñito (Sos del Rey Católico) (Foto: romanicoaragones.com) |
[1] Ruiz de
la Rosa, José Antonio. Traza y simetría
de la arquitectura en la antigüedad y Medievo, p. 18.
[2] Navarro
Fajardo, Juan Carlos. Bóvedas góticas de
la catedral de Orihuela (Alicante). Revista EGA, nº 11, año 2006, pp, 148-149; en: Rafael Fuster Ruiz, Las marcas de
cantería en el contexto de la arquitectura medieval: proporción y mesura, nota 6.
BIBLIOGRAFÍA
-LLOVERAS I MONSERRAT, KIM. La piedra de mesura de Veruela. Servicio
de Cultura de la Diputación de Zaragoza. Zaragoza, 1990.
-RUIZ DE LA ROSA, JOSÉ ANTONIO. Traza y simetría de la arquitectura en la
Antigüedad y en el Medievo. Universidad de Sevilla. Sevilla, 1987.
En la web:
-www.signoslapidarios.org. Las marcas de cantería en el contexto de la arquitectura medieval: proporción y
mesura. Rafael Fuster Ruiz.
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