La actividad musical a finales del siglo XVI estuvo
centrada exclusivamente en las catedrales, monasterios e iglesias. En estos
centros hubo maestros de canto (maestros de capilla), órganos (en la capilla
real y en los monasterios cistercienses) y magníficos libros de canto. Entre
estos últimos hay que destacar el “Tropario” de San Juan de la Peña, el “Himnario”
de la catedral de Huesca y, especialmente, el “Misal” oscense, con anotaciones
musicales, de mediados del siglo XIII.
En el terreno musical se considera que el Renacimiento
fue una de las épocas más brillantes, y buena prueba de ello es la polifonía,
que se definió entonces. Hay también una valoración del sonido instrumental,
así como un considerable desarrollo y variedad de instrumentos.
Junto a la producción coral y orquestal, debe
recordarse también la producción de la música para órgano, campo en el que a
partir de mediados del siglo XVII
se produjo una renovación similar a la de la música coral. Surgió una nueva
forma de componer, progresivamente alejada de las formas barrocas, de estilo
más libre (sonatas, minués, pastorelas…) que cada vez más fue destinada a ser
interpretada mediante clavecín y pianoforte o piano, instrumento que adquirió entonces
un gran auge. El resto de la música instrumental carece de relieve, pese al
incremento y diversidad de los ministriles. Generalmente se limitó a ejecutar,
doblar o glosar obras de rico repertorio polifónico, que tuvo la forma más
celebrada en el villancico, por su adecuación a la estética barroca.
Cantoral miniado del siglo XVI escrito en letra gótica. Badajoz. |
La falta de una imprenta musical, como la que existió
en el XVI, ha perjudicado seriamente la conservación del patrimonio aragonés en
este terreno. En el museo de objetos litúrgicos, en la sacristía de San Esteban
de Sos, hay del siglo XVI, siete cantorales, dos de ellos con iniciales
miniadas, uno con grabados fechado en 1563, y tres salterios; del siglo XVII
tenemos un cantoral y un salterio; y del siglo XVIII dos cantorales, uno de
ellos de los Carmelitas Descalzos de Sos del Rey Católico fechado en 1823.
BIBLIOGRAFÍA
-AZPEITIA, ÁNGEL. “Museo parroquial de San Esteban”, en Arte religioso en la villa de Sos del Rey
Católico. I.F.C. Zaragoza, 1978.
-BEGUE GIMENO, JOSÉ LUIS. El
esplendor del órgano. Historia de Aragón, XIV. Coleccionable Heraldo de
Aragón. Zaragoza, 1991.
-SAN VICENTE, ÁNGEL. “Acotaciones documentales para la historia del
arte en Cinco Villas durante el siglo XVI”, en Estudios en Homenaje al Dr. Eugenio Frutos Cortés. U.Z., 1977.
No hay comentarios:
Publicar un comentario